Llevo mucho sin escribir si; la verdad es que el proceso de hacer las paces con uno mismo, con sus objetivos, con sus lesiones y expectativas aplazadas…. a veces se nos alarga demasiado.
Pero ya estamos de vuelta, como en Juego de Tronos «winter is coming» ( porque aquí en Burgos ya se sabe que no hay otoño…) empiezan a reflejarse buenos resultados y sensaciones que no habían salido en todo el año y eso que este es el típico periodo de pretemporada, donde empezamos a competir y cogemos agujetas día sí y día también.
Mi temporada este año termino antes de lo esperado, la idea era finalizar en Julio con el Campeonato de España de 5000, pero a primeros de Junio volví a resentirme del piramidal, casi como la primera vez en Octubre del año pasado, así que cansada de tantos dolores decidí parar por completo tres semanas y comenzar de cero en Julio. A lo largo de esas semana me dedique a caminar y pasear por el monte con una de mis perras, combinando lo poco que hacía con sesiones de mi fisio Iván para intentar quitar esos pinzamientos del «culo».
La primera semana de Julio empecé con tantas ganas a rodar, que al cuarto día marché ladera abajo en un entrenamiento por terreno variado, si señor, fue digno ver y grabar, pero no había nadie tan madrugador por allí ese día 😅 (estaba claro que si no volvía con algún incidente no era yo) Julio y Agosto transcurrió a base de rodajes y más rodajes, cambios de ritmo y más rodajes, un par de carreras entre amigos y más rodajes… ya tenía hasta ganas de empezar con series, estaba hasta el moño de tanto rodaje y fartlek. Pero mi entrenador Guty me hizo ver que no hacía falta hacer series aun para correr rápido, a lo que días más tarde me tocó darle toda la razón.
Llega Septiembre y me planto el día 9 (después de un sábado de bodorrio total en Santander hasta la madrugada) en Pampliega, una de las carreras populares del circuito de la Diputación de Burgos. Sólo tres kilómetros en los que fui desde principio a fin liderando la prueba y al fin marcando unos segundos mejor tiempo que el año pasado; así que era cierto, no estaba tan lenta como yo pensaba.
Al siguiente fin de semana me veo de nuevo vencedora en una carrera bien distinta, lenta, todo campo a traves, 10 kilómetros y mucho calor, que me sirvió para seguir sumando entrenos pero no para ver reflejado el tiempo que podía hacer sobre esa distancia tras estos meses de entrenos.
Y por fin llega el dia 30 y acudo a Santa Marta de Tormes, un 10k homologado en un trazado bastante llano. Mi posición en carrera fue todo el rato la tercera, pero eso era lo de menos, iba rápida para los tiempos en los que había competido a lo largo del año y muy cómoda, las sensaciones fueron muy buenas pero aun mejor fue ver el 36’32 al cruzar la meta.
Casi no me lo creía, llevaba más de un año sin ver eso en un crono y para rematar seis días más tarde en la Higuero Running Festival vuelvo a correr en otro 36, no podía estar más contenta.
Sin apenas enterarme casi de estas semanas de entrenos llega este domingo pasado la tercera edición de la Campofrío Maratón de Burgos. Ganadora de la media en las dos anteriores ediciones me enfrentaba de nuevo a la distancia de los 21k, con mucho respeto por las ultimas malas experiencias, añadiendo ademas que el año pasado fue donde me lesioné….tenía una deuda pendiente con esta cita y no pudo salir mejor…Campeona de nuevo!!!! y esto se merece otra entrada en condiciones…..la semana que viene😉
